PORT CHARLOTTE, Florida – Todo iba bien para Shane McClanahan el sábado en el Charlotte Sports Park. Su recta alcanzaba la parte alta de las 90 millas por hora, su repertorio de lanzamientos secundarios estaba desconcertando a los Medias Rojas y estaba haciendo un uso eficiente de todo su arsenal en su último ajuste antes del Día Inaugural.
Y de pronto, todo salió muy mal.
Marcelo Mayer abrió la parte alta de la tercera entrada, y al principio parecía que el problema era que su foul había golpeado al umpire del plato, Jeremie Rehak, en la careta.
Pero las repeticiones mostraron a McClanahan dejando caer su brazo izquierdo a un lado al soltar el lanzamiento a Mayer, haciendo una mueca de dolor, alejándose del plato y saltando en el lugar un par de veces antes de abandonar el terreno con el preparador físico principal, Joe Benge.
El manager Kevin Cash luego le dijo al presentador de Rays Radio, Chris Adams-Wall, durante una entrevista en el juego, que la lesión era “más un problema relacionado con el tríceps [izquierdo]”. Se someterá a exámenes y pruebas para determinar la gravedad en los próximos días.
McClanahan estaba a unos días de hacer su primera presentación en un juego de temporada regular por primera vez desde la temporada del 2023. El as de los Rays está en la recta final de su regreso de una segunda cirugía de Tommy John y ha utilizado la primavera para mostrarse como el mismo lanzallamas que los fanáticos de Tampa Bay vieron debutar durante la postemporada del 2020 y realizar dos aperturas del Día Inaugural (el 2022 y el 2023) y una convocatoria como abridor del Juego de Estrellas (2022).