La buena suerte siempre ha estado en la esquina de Dave Roberts
A principios de esta semana, los Dodgers transmitieron un programa especial en la cadena que transmite sus juegos como una forma de celebrar su t¨ªtulo de Serie Mundial 2020 con su base de fan¨¢ticos, ya que la organizaci¨®n no pudo realizar un desfile por las calles de Los ?ngeles.
La fiesta virtual cont¨® con algunos de los jugadores con m¨¢s antig¨¹edad del club, Clayton Kershaw, Kelly Jansen, Justin Turner, Corey Seager, el Jugador M¨¢s Valioso del Cl¨¢sico de Oto?o y Mookie Betts.
Pero no pudo haber un invitado m¨¢s importante en esta ¨²nica celebraci¨®n en l¨ªnea que el manager Dave Roberts.
Al llegar al segundo viernes 13 de 2020, una fecha que muchos comparan con la mala suerte, bien podr¨ªamos decir que Roberts quiz¨¢s fue el amuleto de la suerte que la organizaci¨®n de los Dodgers necesitaba despu¨¦s de pasar 32 a?os sin ganar una Serie Mundial.
Solamente preg¨²ntale a los Medias Rojas por si tienen dudas.
Enfrentando la eliminaci¨®n en el Juego 4 de la Serie de Campeonato de la Liga Americana de 2004 y el equipo perdiendo 4-3 en la parte baja de la novena entrada, Roberts se rob¨® la segunda base y posteriormente anot¨® con un sencillo para empatar el juego e impulsar a los Medias Rojas a quiz¨¢s la mejor remontada en la historia de los deportes para ganar la serie en siete juegos y luego barrer a los Cardenales para lograr el primer t¨ªtulo del equipo desde 1918.
Roberts tard¨® solo un a?o despu¨¦s de ser nombrado dirigente por primera vez en su carrera para llevar a los Dodgers a la Serie Mundial. La mala suerte los dej¨® cortos en dos ocasiones, perdiendo ante los Astros en siete juegos en 2017, y ante los Medias Rojas, su ex club, en una serie de cinco juegos en 2018.
Sus d¨ªas como jugador terminaron hace mucho tiempo, pero tal vez el grito de guerra de Roberts, "Este es nuestro a?o", fue tan poderoso para ayudar a llevar a los Dodgers a su primer t¨ªtulo desde 1988 como aquella base robada del 2004 borr¨® 86 a?os de frustraci¨®n en Boston.
Si bien que se coron¨® campe¨®n por primera en su carrera como pelotero con los Medias Rojas, la organizaci¨®n tuvo otros planes y lo incluy¨® en un canje a los Padres en diciembre de aquel a?o.
La diferencia esta vez, que tras lograr su segundo anillo en el b¨¦isbol de las mayores, Roberts regresar¨¢ para conquistar coronas consecutivas, algo que ning¨²n equipo de Grandes Ligas ha acertado en 20 a?os.
La suerte estar¨¢ en la esquina de Roberts, sin duda alguna.