El HR m芍s largo: ※Todav赤a escucho el sonido§
El ex receptor Tim McCarver estaba del otro lado de la llamada telef車nica hablando sobre Willie McCovey, quien hubiera cumplido 84 a?os el lunes. McCarver comenz車 a hablar de cu芍nto -- en un equipo incluso con Willie Mays en sus filas -- los aficionados de los Gigantes en San Francisco apreciaban a McCovey porque, como McCarver indic車, ※fue la estrella que surgi車 ah赤§, desde el momento en que el apodado Strech lleg車 a las Grandes Ligas en 1959 y gan車 el premio al Novato del A?os tras disputar apenas 52 encuentros.
※Hay muchos motivos para recordar gratamente a Willie§, expres車 McCarver, ※empezando por la clase de caballero que era. De la cabeza a los pies. Se ve赤a mucho m芍s alto que los 6-4 que med赤a. Pero eso no es mi mayor recuerdo§.
Al pregunt芍rsele cu芍l era, nos damos cuenta de la belleza de hablar sobre b谷isbol, especialmente con alguien como McCarver que sabe contar historias. En ocasiones, lo 迆nico que debes hacer es hacer una simple pregunta.
※Dio el batazo m芍s fuerte de cualquiera de los pitcheos que ped赤§, declar車 McCarver. ※Eso es lo que mejor recuerdo§.
?El m芍s fuerte?
McCarver solt車 una carcajada, pero luego habl車 lentamente.
※El. Batazo. M芍s. Fuerte. Contra. Cualquier. Pitcheo§, repiti車 McCarver. ※Al menos que yo haya pedido§.
McCarver estaba detr芍s del plato por los Cardenales en 1966, que fue parte de una era en la que San Luis jug車 tres Series Mundiales, ganando dos, y en otra dejaron escapar un ventaja de 3-1 contra los Tigres en 1968. Al Jackson era el lanzador por los Cardenales contra los Gigantes.
※No hab赤an terminado de construir el Busch Stadium en ese entonces§, record車 McCarver. ※Una parte de los jardines todav赤a estaba bajo construcci車n, lo que, retrospectivamente, fue bueno porque algo se hubiera da?ado§.
McCarver dijo que fue un pitcheo rompiente que le pidi車 a Al Jackson en septiembre de 1966. Tambi谷n ha sido se?alada como un cambio. Pero lo que importa es que qued車 en la zona de strike. El mismo McCovey se atrever赤a a decir que no fue el jonr車n m芍s largo que peg車 -- aunque se le dio una distancia de 515 pies -- pero s赤 dijo que fue el m芍s fuerte. Mike Shannon, quien patrullaba la pradera derecha por San Luis en dicho juego, siempre afirm車 que fue el cuadrangular m芍s largo que hab赤a visto, y que algunos todav赤a lo describ赤an como el bambinazo m芍s largo en la historia del primer Busch Stadium.
※Espantoso§, indic車 McCarver.
Luego comenz車 a re赤rse otra vez mientras recordaba el momento y agreg車, ※?una desgracia!§
Dos a?os antes, McCarver era el receptor en el cierre de la novena entrada del Juego 3 de la Serie Mundial contra los Yankees, cuando Mickey Mantle peg車 un vuelacercas decisivo contra el nudillero Barney Schultz que pas車 por encima de la cabeza de Shannon y termin車 en el tercer nivel de las gradas del antiguo Yankee Stadium.
Luego, le pregunt谷 a McCarver qu谷 pasaba por su cabeza mientras observaba la trayectoria de la bola.
※?No hubo ninguna trayectoria!§ declar車 McCarver. ※Solamente hubo el sonido del batazo§.
Durante varios a?os despu谷s, McCarver y Jackson ya bromeaban sobre el pitcheo, con McCarver pregunt芍ndole a Jackson por qu谷 realiz車 ese pitcheo y Jackson respondiendo, ※Porque t迆 lo pediste, idiota§.
※Y 谷se no es el final de la historia§, manifest車 McCarver. ※Por primera y 迆nica vez en su vida, Al llam車 a un oponente que le hab赤a pegado jonr車n§.
?Qu谷 le dijo?
※?Lo felicit車!§
McCovey conect車 521 vuelacercas en su carrera de Grandes Ligas. Fue un gigante del juego en todos los aspectos en el Candlestick Park. Eso es lo maravilloso del b谷isbol, que todo este tiempo despu谷s de que fue un muchacho en dicho estadio tras llegar a las Mayores para batear .354 en esos 52 partidos en 1959, el cuerpo de agua detr芍s del jard赤n derecho en el Oracle Park sea conocido como la Ensenada McCovey. Y cada vez que un bateador busca enviar una bola fuera del estadio, el nombre de Willie McCovey sigue vivo.
※Era un hombre muy corpulento§, dijo McCarver, ※especialmente cuando entraba a la caja de bateo. Una vez alcanz車 uno de mis bates y te lo juro, parec赤a un palillo. Y cu芍nto lo quer赤an en San Francisco§.
Lo quer赤an incluso despu谷s cuando dio un tablazo que rompi車 los corazones de los fan芍ticos de los Gigantes. Era el cierre de la novena entrada del Juego 7 de la Serie Mundial de 1962, con los Yankees arriba 1-0. Ralph Terry todav赤a estaba en la lomita dos a?os despu谷s de conceder el jonr車n de oro en el Juego 7 contra Bill Mazeroski en el Cl芍sico de Oto?o de 1960.
Con dos hombres en base -- uno de ellos Mays -- y dos outs. McCovey peg車 una l赤nea que casi le arranca el guante a Bobby Richardson, pero que de todas maneras el intermedista logr車 atrapar. Nadie lo sab赤a en ese momento, pero pasar赤a casi medio siglo antes de que los Gigantes ganaran una Serie Mundial en San Francisco.
?se no es el batazo que McCarver recuerda. ?ste es el momento para recordar todo lo hecho por McCovey.
※Todav赤a escucho el sonido§, concluy車 McCarver.