?Stanton al HOF? Su desempe?o en octubre podr¨ªa estar acerc¨¢ndolo
CLEVELAND -- Hace a?os, cuando Mike Stanton fue rebautizado como "Giancarlo" y los Marlins de Florida se convirtieron en los Marlins de Miami, el corpulento joven de 22 a?os, que apenas hab¨ªa jugado unos pocos cientos de partidos en las Grandes Ligas, se sent¨® aqu¨ª en el Progressive Field, en el clubhouse de los visitantes, y le preguntaron qu¨¦ tipo de carrera se imaginaba.
"Quiero ser un bateador", expres¨® Stanton ese d¨ªa del 2012. "No quiero hacer eso de batear .230 con 45 jonrones. No jugu¨¦ b¨¦isbol todo el a?o cuando crec¨ªa, as¨ª que no aprend¨ª a batear. S¨®lo sab¨ªa c¨®mo darle duro a la bola".
Para muchos, eso es exactamente lo que Stanton representa: Un tipo que le pega fuerte a la pelota. Y en el Juego 4 de esta Serie de Campeonato de la Liga Americana, eso fue exactamente lo que hizo con otro jonr¨®n clave en octubre.
Las carreras tres impulsadas por el enorme batazo de 404 pies y 105.7 millas por hora de Stanton a las gradas, ante una recta de cuatro costuras de Cade Smith en la parte alta de la sexta entrada, quiz¨¢s no fueron las rayitas de la ventaja definitiva en otra noche loca en el Progressive Field, pero ciertamente fue el swing m¨¢s importante en la victoria 8-6 que dej¨® a los Yankees de Stanton a una victoria de la Serie Mundial.
Ver estos monumentales batazos es reconocer que, s¨ª, Stanton, ahora con 34 a?os, sigue peg¨¢ndole fuerte a la bola. Pero es ese deseo de ser un gran bateador, y no s¨®lo un jonronero, lo que lo ha puesto en la posici¨®n de brillar en este escenario y ante brazos verdaderamente ¨¦lite.
No se logra eso simplemente yendo al plato a balancear el bate sin ton ni son y esperando conectar uno.
"Trato de obtener cualquier informaci¨®n que pueda, cualquier video, todos los swings que necesito", dijo Stanton. "Lo agoto todo. Por eso estoy cansado despu¨¦s de estos juegos, y disfruto eso. Disfruto esa lucha. Lo necesito".
Y vaya que estamos disfrutando de Standon en la postemporada. Est¨¢ bateando .300/.400/.767 en ocho juegos. Ha conectado cuatro jonrones, dos dobles, impulsado nueve carreras, recibido cinco boletos y anotado cinco carreras. ?Incluso ha robado una base!
Ver todo esto es entender que es hora de pensar en Stanton no como el bateador designado lesionado demasiado a menudo que no fue tan exitoso como muchos esperaban en su intento de ser el compa?ero de Aaron Judge.
Es hora de empezar a pensar en ¨¦l como un potencial Sal¨®n de la Fama.
Podr¨ªa sonar descabellado, dado el discurso que ha rodeado a Stanton durante gran parte de su carrera con los Yankees. Lleg¨® al Bronx diciendo: "Lo siento por las pelotas", pero terminamos sintiendo l¨¢stima por ¨¦l. Ha tenido demasiadas lesiones en la parte inferior del cuerpo como para contarlas, alcanzando las 500 apariciones al plato s¨®lo dos veces en siete temporadas con los Yankees. Es por eso que el gerente general de los Yankees, Brian Cashman, coment¨® en las Reuniones de Gerentes Generales del a?o pasado que tiene que planear que Stanton "se lastime de nuevo, muy probablemente, porque parece ser parte de su juego".
Cashman luego intent¨® aclarar ese comentario, pero seamos honestos: Ten¨ªa raz¨®n. Las lesiones, desafortunadamente, son parte del juego de Stanton, limit¨¢ndolo a 114 partidos este a?o.
Y, sin embargo, cuando miras lo que Stanton ha producido, cuando est¨¢ saludable, tanto en la temporada regular como en la postemporada, est¨¢ empezando a parecerse al tipo de cosas que se escriben en una placa.
Stanton fue el campe¨®n de jonrones de la Liga Nacional (37) con los Marlins en el 2014 y termin¨® segundo en la votaci¨®n al Jugador M¨¢s Valioso ese a?o. Tres a?os despu¨¦s, fue el JMV del Viejo Circuito. No ha terminado m¨¢s alto que el puesto 19 en la votaci¨®n desde entonces, pero est¨¢ a s¨®lo 71 cuadrangulares de los 500, algo que en el pasado ha garantizado un boleto a Cooperstown para aquellos que no est¨¢n p¨²blicamente conectados a sustancias para mejorar el rendimiento.
Poner la producci¨®n de un jugador en el contexto de su era es importante. Y en el contexto de esta ¨¦poca, Stanton ha rendido un 36% mejor (un OPS+ de 136) que el bateador promedio.
?Sabes qui¨¦n m¨¢s tuvo un OPS+ de 136 en su carrera? Ken Griffey Jr.
Obviamente, Stanton no es Griffey en t¨¦rminos de la totalidad de sus contribuciones, pero eso proporciona una mejor comprensi¨®n de su producci¨®n en el plato.
Y luego est¨¢ la postemporada, que para Stanton es otro nivel por completo.
Se puede argumentar que los n¨²meros de postemporada deber¨ªan importar m¨¢s que nunca al considerar el caso de un jugador para el Sal¨®n de la Fama, porque la postemporada es m¨¢s extensa que nunca. Con m¨¢s rondas, m¨¢s equipos y, por lo tanto, menos ¨¦nfasis en la temporada regular, el calendario de MLB est¨¢ orientado en torno a octubre m¨¢s que nunca.
Y nadie ha dominado octubre como Giancarlo Stanton.
Stanton ha conectado 15 jonrones e impulsado 33 carreras en 35 encuentros de postemporada en su carrera. Analizando juego por juego, es el bateador de jonrones m¨¢s prol¨ªfico en la historia de la postemporada, superando a Babe Ruth (15 en 41 encuentros). Si extrapolamos la producci¨®n de Stanton en los playoffs a lo largo de una campa?a de 162 partidos, tendr¨ªa 67 vuelacercas y 143 carreras impulsadas.
"Creo que cuando los grandes momentos est¨¢n presentes y ¨¦l est¨¢ enfocado, es tan bueno como cualquiera", dijo Eduardo P¨¦rez, quien es parte del equipo de ESPN Radio para esta Serie de Campeonato de la Liga Americana y fue el coach de bateo de Stanton en Miami en 2011-12. "Siempre ha podido batear pitcheo ¨¦lite. Y cuando llega la postemporada, se trata de pitcheo ¨¦lite. Por eso puede concentrarse y enfocarse".
En la cabina, P¨¦rez dijo que se enfoca m¨¢s en las veces que Stanton no hace swing que en las veces que lo hace.
"Sus decisiones", indic¨® P¨¦rez, "son lo que lo mantiene a tono".
Stanton dej¨® pasar un strike cantado en la sexta, y una cuenta de 0-1 es un lugar peligroso a la hora de enfrentar a Smith, quien lleg¨® a este choque habiendo ponchado a 15 de los 30 bateadores a los que se hab¨ªa enfrentado en la postemporada. Despu¨¦s de hacer swing y fallar para el segundo strike, Stanton vio pasar la primera bola y luego conect¨® la recta de 94.2 mph de Smith en la zona alta.
La noche anterior, Stanton hab¨ªa fallado un slider de Clase y tres cutters antes de conectar un slider de 89.5 mph en la zona baja.
Estos son turnos al bate que no habr¨ªan ocurrido para Stanton al principio de su carrera, cuando era m¨¢s un bateador de errores. Los Marlins ten¨ªan una m¨¢quina en la jaula de bateo que lanzaba bolas con efecto, y Stanton se paraba en la caja y enfrentaba bolas que se mov¨ªan lateralmente. De cada 100 lanzamientos, probablemente 80 estar¨ªan fuera de la zona, y el ejercicio ten¨ªa la intenci¨®n de ense?arle a Stanton a leerlos, a ajustarse al movimiento desconcertante que apenas comenzaba a dominar en MLB.
"?l nunca hab¨ªa visto lanzamientos con efecto a nivel de preparatoria", dijo P¨¦rez. "No pod¨ªa reconocerlos".
Ahora los est¨¢ reconociendo. Y todos deber¨ªamos reconocer tambi¨¦n que este es un jugador especial en la cima de sus condiciones en los juegos que m¨¢s importan.
Tal vez eso no lleve a Giancarlo Stanton al Sal¨®n de la Fama. Pero lo est¨¢ acercando m¨¢s de lo que aquellos que s¨®lo lo ven como un bateador propenso a las lesiones se dar¨ªan cuenta.
Por ahora, Stanton tiene una meta diferente.
"Quiero un anillo", dijo.
Eso es otra cosa que se ver¨ªa bien en una placa.