BOSTON -- En el 2017, fungiendo como gerente general de la selecci¨®n de Puerto Rico para el Cl¨¢sico de Mundial de B¨¦isbol, Alex Cora, trat¨® de reclutar a Christian Arroyo para el equipo boricua que terminar¨ªa siendo el famoso ¡°Team Rubio¡±.

Al final, Arroyo -- quien a¨²n no hab¨ªa debutado en Grandes Ligas tras ser la primera selecci¨®n del Draft de los Gigantes en el 2013 -- no particip¨® en el torneo. Pero el oriundo del ¨¢rea de Tampa, Florida habla con orgullo de sus ra¨ªces puertorrique?as y ahora, como segunda base de unos Medias Rojas dirigidos por el mismo Cora, trata de ayudar a Boston a derrotar a los Astros en la Serie de Campeonato de la Liga Americana y pasar a la Serie Mundial.

¡°Arroyo no tiene miedo de decir que es uno de nosotros¡±, dijo durante la serie Cora.

En esta SCLA, hay una fuerte camada puertorrique?a entre ambos equipos, un total de 10 entre jugadores, coaches y dirigente. Pero diferente a los otros, que nacieron en la Isla del Encanto, Arroyo nunca ha ido a Puerto Rico y tampoco habla espa?ol.

El pap¨¢ de Arroyo, Israel, es un neoyorquino de ra¨ªces boricuas y se divorci¨® de la mam¨¢ de Christian cuando ¨¦ste ten¨ªa dos a?os. Jugando b¨¦isbol desde chiquito en el ¨¢rea de la Bah¨ªa de Tampa, Arroyo no estuvo rodeado de la cultura puertorrique?a en su infancia. Ahora, sobre todo con tanto sabor boricua en esta serie, ans¨ªa cambiar eso.

¡°En realidad, no tuve la oportunidad de empaparme mucho en eso, pero es algo con el que definitivamente quiero involucrarme¡±, expres¨®. ¡°Es parte de mi herencia. Nunca le he huido a eso y es bastante bueno verlo salir en este ambiente y poder apreciarlo.

¡°Definitivamente, me siento parte de eso m¨¢s ahora¡±.

Jugando a nivel de Grandes Ligas con los Gigantes, Rays (su equipo favorito como ni?o) y ahora Medias Rojas, Arroyo se ha encontrado con muchos ligamayoristas boricuas. En particular, su contrincante en esta serie, el torpedero de los Astros Carlos Correa, le asegur¨® hace un tiempo que los jugadores puertorrique?os se apoyan uno al otro, algo que ha empezado a hacer Arroyo.

¡°Es un juego dif¨ªcil. Todos queremos que el otro tenga ¨¦xito. No queremos que el otro fracase. Claro, cuando estamos jugando en contra, queremos ganarle¡±, explic¨® Arroyo. ¡°Pero cuando no estamos jugando en contra, es bueno ver a los muchachos del mismo origen latino tener ¨¦xito¡±.

Cuenta Arroyo que en tono divertido, los jugadores boricuas se r¨ªen con ¨¦l porque es puertorrique?o y no habla el idioma castellano. De hecho, aprender el espa?ol es una meta para el infielder.

¡°Tengo tantos compa?eros latinos, que ser¨ªa bueno poder conversar con ellos en espa?ol¡±, manifest¨® el joven de 26 a?os de edad. ¡°Para m¨ª, se trata de asimilar tu herencia. Hay una gran base de fan¨¢ticos latinos aqu¨ª en Boston y en todas partes que ama el b¨¦isbol¡±.

No s¨®lo es el idioma. Con la orientaci¨®n de sus colegas puertorrique?os, Arroyo se ha hecho fan¨¢tico de la m¨²sica latina, nombrando los temas ¡°25/8¡± de Bad Bunny y ¡°Me Acostumbr¨¦¡± de Arc¨¢ngel con Bad Bunny como dos de sus canciones favoritas. Y recuerda con mucho cari?o la comida puertorrique?a de su abuela paterna.

Arroyo asegura que quiere conocer Puerto Rico m¨¢s temprano que tarde y tampoco descarta jugar pelota invernal en la isla.

?En cuanto a jugar con la selecci¨®n boricua en el pr¨®ximo Cl¨¢sico del 2023, en caso de ser invitado?

¡°Creo que ser¨ªa algo grande¡±, asegur¨® Arroyo, quien represent¨® a los Estados Unidos hace ocho a?os en el Mundial Sub-20. ¡°Ser¨ªa una decisi¨®n dif¨ªcil, pero lo considerar¨ªa, definitivamente. Ser¨ªa bastante especial¡±.