¡®Big Papi¡¯ es reconocido... ?previo al Sal¨®n?
BOSTON ¨C Los fervientes aficionados del dominicano David Ortiz en Boston tuvieron otra oportunidad de celebrarlo el mi¨¦rcoles por la noche, cuando el ¡°Big Papi¡± recibi¨® el Premio Baseball Legacy en el?Museo del Deporte en?New England, como parte del evento anual ¡°La Tradici¨®n¡±.?
La verdad es que el legado de Ortiz tiene tiempo establecido?¨C en Boston, en la Rep¨²blica Dominicana y en el mundo del b¨¦isbol.?
Pero volver a la ciudad en donde construy¨® su leyenda nunca pasar¨¢ de moda para el carism¨¢tico ca?onero, quien fue vital?en las?tres Series Mundiales ganadas por los?Medias Rojas en sus 16?a?os de carrera.?
¡°Es un honor¡±, dijo el oriundo de Santo Domingo. ¡°Mucha gente est¨¢ tom¨¢ndose un tiempo para reconocernos a nosotros, los?atletas. Es algo?bien especial. Boston es una ciudad incre¨ªble; mi segunda casa¡±.?
Claro, para Ortiz,?el honor principal podr¨ªa estar a sus puertas. Est¨¢ en su primer a?o en la boleta del Sal¨®n de la Fama, a la espera de los resultados que ser¨¢n anunciados el 25 de enero pr¨®ximo, en MLB Network.?
Para alguien que ha recibido cuanto?reconocimiento se conozca dentro del mundo del deporte, este ser¨ªa el?homenaje principal para el reconocido Nro. 34.?
¡°Como siempre digo, hay cosas en la vida?que no controlamos¡±,?coment¨®?Ortiz. ¡°Lo ¨²nico que control¨¦ fue el bate de b¨¦isbol, cada vez que llegaba mi turno. Creo que me fue bien,?y esperemos que ocurra en el alg¨²n momento.??Qui¨¦n no quiere ser parte de un grupo ¨¦lite en el Sal¨®n de la Fama?¡±?
Para Ortiz, ser¨ªa un momento sumamente especial, dada su historia. S¨ª, era un jugador grande, pero nunca?fue?un prospecto de peso.?
Con los Mellizos de Minnesota, fue un jugador propenso a las lesiones, alcanzando un m¨¢ximo de 20 jonrones en el 2002.?
Luego de esa campa?a, fue dejado libre. El dominicano Pedro Mart¨ªnez, quien hab¨ªa recibido un jonr¨®n de su coterr¨¢neo en el?Metrodome?unos meses atr¨¢s, no pod¨ªa creer que el ca?onero hab¨ªa sido liberado.
Mart¨ªnez alert¨® de inmediato a los Medias Rojas, intentando convencer al equipo de contratar a Ortiz. No pas¨® mucho tiempo para que el gerente general para entonces, Theo Epstein, le ofreciera un contrato por un a?o y US$1.25 millones a Ortiz. El ca?onero no dudo en aceptar.?
Para mediados del 2003, Ortiz hab¨ªa recibido lo que tanto hab¨ªa pedido durante toda su carrera; una oportunidad?de?jugar a diario.?
Aunque tuvo un par de baches en el camino, Ortiz no dej¨® de batear por el resto de su carrera, en la que no conoci¨® otro lugar que no fuera Boston.?
El impacto del quisqueyano?trascendi¨®?el deporte.?
¡°Por la manera en la que lo obtuvieron, la historia de ¨¦l llegando desde Minnesota y por c¨®mo los Medias Rojas ayudaron a convertirlo en un Sal¨®n de la Fama desde el momento en el que se puso el uniforme del equipo¡±, dijo el exjugador y ejecutivo del equipo de baloncesto, los Celtics de Boston, Danny?Ainge. ¡°S¨ª, sencillamente un gran, gran jugador y una de las leyendas de los?Medias?Rojas¡±.?
Para Ortiz, cualquier reconocimiento que reciba es un adorno m¨¢s.?
¡°Yo fui un chico que comenz¨® a jugar b¨¦isbol s¨®lo por diversi¨®n, pero que de?pronto me lo tuve que tomar con mayor seriedad para poder poner a mi familia en una mejor situaci¨®n¡±, confes¨® Ortiz. ¡°Luego tuve que seguir con la seriedad en el asunto porque mucha gente comenz¨® a depender de m¨ª. As¨ª, de pronto, ves tu nombre junto a los mejor en la historia. No puedes pedir mucho m¨¢s que eso¡±.