NUEVA YORK -- Willie Mays, el electrizante pelotero cuya combinaci¨®n singular de talento, actitud y expresividad lo convirti¨® en uno de los deportistas m¨¢s queridos y destacados en la historia de Estados Unidos, ha fallecido. Ten¨ªa 93 a?os.

La familia de Mays y los Gigantes de San Francisco anunciaron conjuntamente el martes que el exjugador hab¨ªa muerto el martes por la tarde.

? Declaraci¨®n del Comisionado sobre el fallecimiento de Willie Mays

¡°Mi padre ha fallecido en paz y rodeado por sus seres queridos¡±, anunci¨® su hijo Michael Mays, en un comunicado que emiti¨® el club. ¡°Quiero agradecer a todos ustedes, desde el fondo de mi coraz¨®n roto, por el amor incondicional que le han mostrado durante a?os. Ustedes han sido la inspiraci¨®n de su vida¡±.

El jardinero central era el miembro m¨¢s longevo del Sal¨®n de la Fama que segu¨ªa con vida. Su forma de atrapar la pelota con el guante y sus recorridos por las bases mientras su gorra sal¨ªa volando simbolizaron su alegr¨ªa por jugar.

Su atrapada por encima del hombro para hacerse de un largo batazo en la Serie Mundial de 1954 es una de las haza?as defensivas m¨¢s celebradas en el b¨¦isbol.

Mays muri¨® dos d¨ªas antes de un juego entre los Gigantes y los Cardenales de San Luis, en el que se honrar¨ªa a las Ligas Negras en el Rickwood Field de Birmingham, Alabama.

¡°Todo el b¨¦isbol de las Grandes Ligas est¨¢ de luto hoy, cuando nos preparamos para reunirnos en el mismo parque donde comenz¨® una carrera y un legado como ning¨²n otro¡±, expres¨® el comisionado Rob Manfred. ¡°Willie Mays llev¨® su brillantez en todos los aspectos desde los Black Barons de la Liga Negra Americana hasta la franquicia hist¨®rica de los Gigantes, de costa a costa en Nueva York y San Francisco.

¡°Willie inspir¨® a generaciones enteras de peloteros y fan¨¢ticos a medida que este deporte creci¨® y se gan¨® de verdad su lugar como nuestro Pasatiempos Nacional... Sus logros y estad¨ªsticas incre¨ªbles apenas sirven para comenzar la descripci¨®n de la maravilla que era ver a Willie dominar el b¨¦isbol en cada forma imaginable. Nunca olvidaremos a este verdadero Gigante, dentro y fuera del terreno¡±.

A lo largo de 22 temporadas, casi todas con los Gigantes de Nueva York y luego de San Francisco, Mays bate¨® para .302, conect¨® 660 jonrones, totaliz¨® 3.283 hits, anot¨® m¨¢s de 2.000 carreras y gan¨® 12 Guantes de Oro.

Por encima de sus n¨²meros, Mays fue el jugador utilizado como bar¨®metro para medir la grandeza en el diamante. Cuando alg¨²n jugador empezaba a despuntar en las d¨¦cadas de los 50 y 60, se sol¨ªa decir, ¡°pero no es Willie Mays¡±.

Mays, sin embargo, declar¨® alguna vez que siempre tuvo ayuda de su torpedero, y despu¨¦s su manager Alvin Dark, quien sol¨ªa darle se?ales por la espalda.

¡°Mostraba un dedo cuando el lanzamiento era una recta... dos cuando era rompiente¡±, relat¨® Mays. ¡°As¨ª pod¨ªa adelantarme a la pelota".

Cuando le preguntaron una vez su secreto para ser tan buen bateador, Mays dijo que hab¨ªa copiado todo.

¡°Lo aprend¨ª observando a (Joe) DiMaggio¡±, se?al¨®. ¡°Siempre lo imit¨¦¡±.

Mays fue el Novato del A?o de la Liga Nacional en 1951, y su Jugador M¨¢s Valioso en 1954 y 1965. Adem¨¢s, es uno de pocos jugadores que conectaron m¨¢s de 50 cuadrangulares m¨¢s de una vez, y uno de 16 (hasta 2014) con cuatro vuelacercas en un mismo partido, una gesta que consigui¨® el 30 de mayo de 1961 en Milwaukee.

¡°Honestamente, puedo decir que nunca trat¨¦ de batear un jonr¨®n a prop¨®sito¡±, dijo una vez. ¡°De hecho, s¨¦ que si tratara de hacerlo, probablemente saldr¨ªa un elevado de out¡±.

Mays fue m¨¢s que sus cifras, y ser¨¢ recordado por la espectacular manera en que jug¨®. De hecho, su incre¨ªble atrapada que ayud¨® a los Gigantes a ganar el primer partido de la Serie Mundial de 1954 es una de las jugadas defensivas m¨¢s famosas en la historia del b¨¦isbol.

Los Gigantes y los Indios de Cleveland estaban empatados 2-2 en la octava entrada en el estadio Polo Grounds de Nueva York, cuando Vic Wertz conect¨® un batazo que recorri¨® unos 400 pies hacia el jard¨ªn central, con dos hombres en base. Mays corri¨® hace el muro, de espaldas al plato, y atrap¨® la pelota por encima del hombro.

La atrapada ayud¨® a mantener el empate, y Dusty Rhodes conect¨® un jonr¨®n por el jard¨ªn derecho para ganar el encuentro 5-2 en 10 innings. Los Gigantes barrieron la serie en cuatro duelos, sorprendiendo a unos Indios que hab¨ªan ganado 111 compromisos en la temporada regular.

Demor¨® poco en convertirse en una estrella. La primera semana de Mays con los Gigantes fue una aberraci¨®n.

Despu¨¦s de batear .477 con Minneapolis en la Asociaci¨®n Americana, Mays fue ascendido a las mayores en mayo de 1951. El guardabosque no conect¨® de hit en sus 12 primeros turnos, antes de sacudir un cuadrangular contra Warren Spahn ¡ªun miembro del Sal¨®n de la Fama¡ª ante los Bravos de Boston.

¡°Me dijo que tem¨ªa que lo mandara de vuelta (a las menores)¡±, record¨® su entonces manager, el hoy difunto Leo Durocher. ¡°Dijo con su vocecita, ¡®se?or Leo, no puedo jugar aqu¨ª¡¯. Le dije, ¡®Willie, mientras yo sea el manager, t¨² eres mi jardinero central¡¯¡±.

Y as¨ª fue por las dos siguientes d¨¦cadas. Despu¨¦s de siete a?os en Nueva York, Mays y los Gigantes se mudaron a San Francisco tras la temporada de 1957. Luego regres¨® a Nueva York para terminar su carrera con los Mets en 1972-73.

Cuando se retir¨®, Mays estaba entre los l¨ªderes hist¨®ricos en varias categor¨ªas. Adem¨¢s de sus cuadrangulares, era quinto en carreras con 2.062, sexto en turnos al bate con 10.881, sexto en partidos jugados con 2.992, s¨¦ptimo en remolcadas con 1.903, noveno en hits con 3.253 y 10mo en slugging con.577.

Mays, quien bate¨® .302 de por vida, gan¨® el t¨ªtulo de bateo de la Nacional en 1954 con promedio de .345. Esa fue una de las 21 ocasiones que su nombre apareci¨® en el primer puesto en la categor¨ªa importante de bateo.