Kirk da de qu¨¦ hablar. ?Viene un mayor rol?
Lleg¨® Alejandro Kirk. Y el joven mexicano anunci¨® dicha llegada el lunes contra los Yankees.
Kirk es uno de los jugadores m¨¢s distintivos de Grandes Ligas, sea que se le vea por televisi¨®n o sus n¨²meros en el boxscore. En la caja de bateo, Kirk¡ªde cinco pies y ocho pulgadas de estatura y 265 libras¡ªapenas se ve m¨¢s alto que el receptor cuando ¨¦ste est¨¢ agachado. Corriendo las bases, hace que el dominicano Vladimir Guerrero Jr. se parezca a Usain Bolt. Kirk no es lo que un esperar¨ªa, y eso es lo que lo hace especial.
En la victoria de los Azulejos sobre los Yankees el lunes en Buffalo, Kirk ya bateaba de 3-3 con un doble cuando lleg¨® al plato en el s¨¦ptimo episodio. El tijuanense dio un batazo a la banda contraria y, diferente a uno de sus turnos anteriores, la bola vol¨® la cerca y puso a celebrar a los compa?eros de Kirk.
¡°Para ser honesto, pensaba que no se iba¡±, dijo Kirk. ¡°Pero cuando (el jardinero Aaron Judge) choc¨® con la verja, sab¨ªa (que era HR). Fue algo grande la sensaci¨®n de correr por las bases. Se siente bien¡±.
?Kirk tiene muchos fans. Sus compa?eros de equipo lo han hecho sentir como en casa.
¡°No podr¨ªa ser mejor¡±, dijo Kirk. ¡°Me dieron la bienvenida. Los muchachos se han portado bien conmigo. Poco a poco, estamos conoci¨¦ndonos y estoy tratando de comunicarme m¨¢s con ellos. No podr¨ªa pedirles m¨¢s¡±.
?Lo hecho por Kirk el lunes lo convierte en el primer receptor de 21 a?os o menos en tener un juego de cuatro hits desde que lo hizo Joe Mauer por los Mellizos en el 2004. Guerrero Jr. se fue de 3-3 con tres empujadas el lunes. ?l y Kirk son apenas el segundo par de compa?eros de equipo con 21 o menos en tener al menos tres imparables con dos extrabases en el mismo partido, despu¨¦s de los Sal¨®n de la Fama Ted Williams y Bobby Doerr en 1939.
Kirk no cuenta con las herramientas f¨ªsicas de varios otros en el roster de Toronto, pero al verlo jugar, uno nota que el juego no es demasiado r¨¢pido para ¨¦l. Por eso supo manejar el salto de Clase-A Avanzada Dunedin a Grandes Ligas.
El valor de Kirk en el bateo es una combinaci¨®n de dos factores. Primero, tiene una de las mentalidades m¨¢s maduras de la organizaci¨®n en el plato. En 151 partidos a nivel de liga menor, el bajacaliforniano negoci¨® 89 bases por bolas y se ponch¨® apenas 60 veces, registrando porcentaje de embasarse de .418. La otra faceta de su juego ofensivo es su tasa de contacto duro, seg¨²n Statcast.
El lunes, sus dos sencillos fueron de 106.6 y 104.6 millas por hora, respectivamente. El segundo le dio a la cerca del jard¨ªn izquierdo y por poco sale de jonr¨®n. Kirk lleg¨® al lunes con cinco de nueve bolas puestas en juego conectadas a m¨¢s de 100 mph, un dato asombroso.
Del lado defensivo, es importante notar la confianza que tiene la gerencia en Kirk detr¨¢s del plato. La oficina central cree que el mexicano ser¨¢ un buen receptor a nivel de Grandes Ligas. Coincide el manager del equipo, el puertorrique?o Charlie Montoyo.
¡°Ha hecho un gran trabajo en la receptor¨ªa. He quedado impresionado con eso¡±, dijo Montoyo. ¡°A la hora de bloquear las bolas tambi¨¦n, se ha ha visto muy bien. Estoy impresionado con su juego general, para ser sincero¡±.
Danny Jansen sigue como el c¨¢tcher titular de los Azulejos, pero Toronto necesitar¨¢ contar con el bate de Kirk. Podr¨ªa ser mucho pedirle a un joven de 21 a?os manejar un cuerpo monticular para la primera postemporada del club desde el 2016, pero el puesto de designado ser¨ªa lo ideal para Kirk en las pr¨®ximas semanas. El novato tambi¨¦n representa una excelente opci¨®n viniendo desde la banca.
Llegando al lunes, los Azulejos contaban con promedio de .271 y OPS de .807 de sus bateadores designados, as¨ª que el puesto ha sido algo productivo. Pero eso se debe a lo hecho por Guerrero Jr. y otros que han compartido el puesto, en vez de un bateador fijo. Si Rowdy T¨¦llez no vuelve de su lesi¨®n¡ªy no se espera que lo haga¡ªKirk podr¨ªa ser la opci¨®n m¨¢s l¨®gica para ser BD titular de Toronto en la postemporada.